lunes, 21 de octubre de 2013

Hablando del sistema nervioso central

Chico casi muere atropellado en una avenida del distrito federal al ir estudiando las neuronas en su clasificación; unipolares, bipolares y multipolar, mientras el joven leía en su pesado libro de salud que sus propiedades les permiten conducir, transmitir y responderse entre ellas, que su comunicación se llama sinapsis y a pesar de que llevan los impulsos del oído, tacto, gusto y visión al encéfalo no se dio cuenta de que un conductor iba directo hacia él. Se ve que la noradrenalina que es un neurotransmisor que mantiene la vigilia, la ensoñación y el estado de ánimo, no le estaba llegando a tiempo y parecía que le daban serotonina pues iba medio dormido. Entre los testigos que comían a un lado de la calle, una señora que vendía tamales no sintió cuando se le cayó una jarra de atole de champurrado en el pie a causa de las encefalinas otro neurotransmisor que inhibe el dolor. Por otro lado una valiente chica corrió a salvar al joven ya que se dio cuenta de que el coche venia y gracias a sus ganglios basales que son tres masas grises encargadas de regular los movimientos desde que inician hasta que terminan, y a que no tenia Parkinson, pudo empujar al chico justo antes de que el coche lo dejara como tortilla mal hecha. Gracias al sistema nervioso autónomo, que controla automática y subconscientemente los sistemas cardiovascular, renal, gastrointestinal, y termorregulador, el corazón del chico pudo seguir con el flujo sanguíneo, pero sintió que casi se le paraba (el corazón, mal pensados) cuando vio a su salvadora rodeada de corazoncitos con el hemisferio derecho que ve en imágenes. Pero para su desgracia la chica que era más de usar su hemisferio izquierdo se levanto y se fue. Reporto para el desgarriate Carpio Romero Ameyalli E.