Ayer en una entrevista con la famosa actriz Bella, sobre su nueva película y sobre lo próspera que está en este momento, surgió de repente la pregunta de: en qué se fijó, para decidir pasar el resto de su vida con su recién esposo “la Bestia” (al cuál le queda muy bien el apodo). A lo que Bella nos contestó: Tal vez su apariencia no sea la más estética, de hecho su carácter tampoco es una gran cualidad en él. A mi lo que en verdad me conquistó, fue su aroma tan varonil y seductor, que soy capaz de percibir gracias a mi nervio olfatorio.
Y para los babas que no saben qué es el nervio olfatorio: Es el primero y más corto de los pares craneales. Es un nervio únicamente sensitivo, responsable del sentido del olfato. Sus fibras nerviosas se originan de las prolongaciones centrales o profundas de las células olfatorias localizadas en la cavidad nasal y se reúnen en haces que se cruzan en varias direcciones, formándose una red en la mucosa para continuarse en 20 ramos nerviosos que atraviesan la lámina cribosa, en grupos mediales y laterales para terminar en los glomérulos del bulbo olfatorio.
Sin duda, qué suerte tiene “la Bestia” por encontrar a Bella, que sin fijarse en todos sus defectos, quedó enamorada de él por el simple olor “varonil” que emana. En fin todo es cuestión de perspectivas.
Reportó para el desgarriate Balcázar Presa Susana (519)